¡No botes la cascará de la Mandarina, úsala!
¡No botes tu medicina a la Basura!
Si antes tiraba las cáscaras de mandarina, después debe esto lo dejarás de hacerlo.
Descubre el poder de la naturaleza depositada en la cáscara de la mandarina, si alguna vez has comido mandarinas sabrás que es una fruta muy deliciosa, con alto contenido en potasio, vitamina C, vitamina A y bajo en sodio que la convierte en una gran aliada para nuestra salud. Pero, seguramente, has estado botando las cáscaras… ¡Stop! ¡Ya no lo hagas más, por favor!
Tanto las naranjas como las mandarinas son una gran fuente de diversas vitaminas. Los altos niveles de vitamina C hacen de la fruta y la cáscara una excelente fuente de antioxidantes para el organismo.
Los antioxidantes que contienen la fruta y su cáscara ayudan a reducir la inflamación en diversas áreas y también previenen el desarrollo de radicales libres en el cuerpo. El cual, nos ayuda a prevenir reacciones de oxidación innecesarias que pueden no ser buenas para la salud en general.
¿Para qué nos sirve?
- La mandarina apoya la salud de la piel:
- La exfoliación con la cáscara seca molida puede ser tu aliado en ayudar a aliviar los síntomas de diversas afecciones de la piel y puede ayudar al cuerpo a mantenerse joven.
- Por su alto nivel de vitamina A, si tienes acné, espinillas u otros problemas menores de la piel, la fruta y la cáscara de la mandarina pueden ayudarte.
el aceite de Cáscara mandarina tiene muchos beneficios. Se cree que los aceites de la cáscara tienen compuestos que ayudan a combatir las bacterias y pueden reducir las posibilidades de infección.
- Ayuda a reducir la presión arterial, a reducir los niveles de colesterol, hígado graso, promoviendo una función hepática normal, además, triglicéridos, asma y tos.
- Regula los problemas de gases intestinales, aumenta la saciedad, mejora el sistema inmunológico, combate la acidez estomacal.
- combate la artritis favoreciendo la buena salud de las articulaciones.
- Ayuda a controlar el Colon irritable
¿Cómo la utilizamos?
Veamos cómo usar las cáscaras de una manera sencilla.
1. En infusión:
- Colocar cuatro cáscaras de mandarinas en un recipiente de vidrio, 500 ml de agua hirviendo, tapamos el recipiente y lo dejamos reposar por 15 minutos. Consumir preferiblemente en ayunas.
2. Hervir o Té:
- Colocar 1 LT de agua en una olla hasta que empiece a hervir, luego, agregar la cáscara de tres mandarinas, bajar el fuego y dejarlo que burbujee por lo menos 3 minutos más para que desprenda toda la esencia y el agua se torne amarillenta.
- Dejar reposar por unos minutos y consumirlo tibio o frío, pero sin agregar ningún edulcorante, azúcar o miel. Tomar una taza por la mañana, preferiblemente en ayuna, tarde y antes de ir a acostar.
- Almacenar en una botella de vidrio en el refrigerador.